Las Pozas de Xilitla, el jardín surrealista
En el legendario y fascinante México, en la huasteca potosina,
en el municipio de Xilitla, existe un lugar mágico sacado de los
lugares más recónditos de la mente de un loco… o un genio. Hablamos de Las Pozas de Xilitla, un conjunto arquitectónico y escultórico surrealista creado por uno de los mayores mecenas de este movimiento, el escocés Edward James, justo en mitad de un jardín selvático.
Llegó al lugar en 1945, y tras comprar los terrenos, decide crear una plantación de orquídeas que tiene durante más de una década. En 1962, una inesperada helada en la región destruyó sus plantaciones, y es entonces cuando se embarca en esta extraña aventura de convertir su plantación en un jardín del edén surrealista. Ese mismo año inicia la construcción del complejo arquitectónico, empleando para ello a trabajadores locales, y continúa su construcción hasta 1984, año en el que le sobreviene la muerte en Italia. En todo ese tiempo construye un total de 36 estructuras en este terreno de casi 40 hectáreas. James plantó flora de todo el mundo, y trajo animales exóticos de los más remotos lugares para que hicieran compañía a su creación artística.
Las estructuras del complejo tienen nombres tan variopintos y curiosos como… La escalera al cielo, La estructura de tres pisos que pueden ser cinco y La recámara con techo en forma de ballena, así como la Casa Don Eduardo, la Casa de los Peristilos y La estructura llamada El Cine, en donde James proyectaba películas a los trabajadores y a sus familias durante la construcción.
Y como no habrá un millón de palabras que haga justicia al regalo para la vista que supone este lugar, aquí os dejo con unas cuantas imágenes. ¡Que las disfrutéis!
El gran sueño surrealista de Edward James
Se dice que James llegó a Xilitla buscando un tipo de orquídea que crecía en el lugar, y cuando llegó a aquel jardín tropical y se le posó encima un enjambre de mariposas, tuvo una revelación y decidió construir esta maravilla escultórica, a mitad de camino entre unas ruinas de una civilización perdida y un mal sueño.Llegó al lugar en 1945, y tras comprar los terrenos, decide crear una plantación de orquídeas que tiene durante más de una década. En 1962, una inesperada helada en la región destruyó sus plantaciones, y es entonces cuando se embarca en esta extraña aventura de convertir su plantación en un jardín del edén surrealista. Ese mismo año inicia la construcción del complejo arquitectónico, empleando para ello a trabajadores locales, y continúa su construcción hasta 1984, año en el que le sobreviene la muerte en Italia. En todo ese tiempo construye un total de 36 estructuras en este terreno de casi 40 hectáreas. James plantó flora de todo el mundo, y trajo animales exóticos de los más remotos lugares para que hicieran compañía a su creación artística.
Las estructuras del complejo tienen nombres tan variopintos y curiosos como… La escalera al cielo, La estructura de tres pisos que pueden ser cinco y La recámara con techo en forma de ballena, así como la Casa Don Eduardo, la Casa de los Peristilos y La estructura llamada El Cine, en donde James proyectaba películas a los trabajadores y a sus familias durante la construcción.
Y como no habrá un millón de palabras que haga justicia al regalo para la vista que supone este lugar, aquí os dejo con unas cuantas imágenes. ¡Que las disfrutéis!
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