El mirador de la Torre Mori en Roppongi Hills, llamado oficialmente Tokyo City View, es uno de los mejores observatorios o miradores de la ciudad de Tokio.
La Torre Mori es, con sus 238 metros de altitud, uno de los edificios más altos de Tokio. Este rascacielos se utiliza básicamente para oficinas, aunque hay un par de plantas con tiendas y restaurantes y finalmente el museo de arte moderno Mori Art Museum en los pisos superiores junto al mirador (existen entradas combinadas a ambos).
La primera planta del mirador tiene bancos y sofás desde donde uno puede admirar la vista tras el cristal, pero cuando el tiempo lo permite, los visitantes pueden subir al Sky Deck o mirador exterior, situado en la azotea del edificio, y disfrutar de unas maravillosas vistas de la ciudad al aire libre, sin cristales.
La Torre de Tokio, todo Odaiba y la bahía, Tokyo Midtown, el parque Yoyogi, Shinjuku y hasta la SkyTree al fondo. Las vistas desde el mirador de la Torre Mori son espectaculares y merecen muchísimo la pena.
Así pues, subir a la plata 54 de la torre Mori merece muchísimo la pena. De día, especialmente en invierno, podéis ver hasta el monte Fuji con claridad…
Como recomendaría en cualquier mirador, probablemente es buena idea ir cuando se pone el sol, así podremos disfrutar de las vistas de día y ver cómo va cayendo la noche sobre la ciudad… y cómo Tokio se va iluminando.
El mirador Tokyo City View está abierto de 10h a 23h (hasta las 01h los viernes y sábados), pero el mirador exterior Sky Deck abre de 11h a 20h siempre que el tiempo lo permita. La entrada cuesta 1500 yenes (+500 yenes para el Sky Deck)
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